Tras el éxito del primer tour por el Carabanchel más antiguo, lanzo ahora un segundo paseo que nos llevará a conocer el Carabanchel de los siglos XIX y XX. Será, por fin, el paseo que nos lleve a la conocida Colonia de la Prensa.
El recorrido comienza en la Plaza de Carabanchel de ahí, tras una introducción, visitaremos la parroquia de San Sebastián. Después, nos centraremos en la antiquísima calle Sombra, donde hay tres puntos importantes: estaba la Academia de Música, la curtidora de Salaberry y, lo más importante, la casa que vio crecer a una de las carabancheleras adoptivas más importantes de la historia: la escritora y diputada María Lejárraga.
De hecho, María aparecerá en varios tramos de la ruta, pues vivió y describió con intensidad su niñez y adolescencia en el antiguo pueblo de Carabanchel de Abajo.
Abandonaremos la calle Sombra en dirección a la antigua calle de San Roque (hoy Padre Amigó) para admirar el antiguo matadero de Leandro Teresa. Tomaremos después María Odiaga para adentrarnos en la colonia de Torres Garrido (1955).
Nuestro periplo continuará hacia la calle Alba de Tormes (una de las más antiguas de Carabanchel) para adentrarnos en el parque de la Patilla, donde os hablaré del colegio Santa Cruz, que veremos a lo lejos, y del marqués de Ceriola, poseedor del terreno que hoy ocupa ese parque.
Por último, seguiremos por Alba de Tormes, mientras os introduzco en las Delicias Cubanas, la quinta del conde de Yumurí que a finales del siglo XIX se partiría en dos para acoger desde 1910, en la parte que se quedó más cercana al ayuntamiento de Carabanchel de Abajo, la conocida como Colonia de la Prensa.
Con la llegada de esta colonia surgía el "Nuevo Carabanchel", un barrio repleto de casas modernistas que primero acogió a periodistas y después a artistas y poetas, incluido Manuel Machado, hermano de Antonio Machado. Hoy, con un aire algo más decadente, la colonia sobrevive al paso del tiempo y, como podréis comprobar, algunos de sus palacios siguen prácticamente igual desde que se construyeron en la década de 1910-1920.
La ruta concluye a la salida de la colonia, en el famoso arco que invita a descubrir esta joya de arquitectura modernista que debemos, en gran parte, al poco reconocido arquitecto Felipe Mario López Blanco.
¡¡Nos vemos en esta nueva ruta!!